“La distribución del encanto” de Ciro BeltránMartes 09 de septiembre al sábado 11 de octubre de 2008
Lunes a Viernes 10:30 a 20:00
Sábado: 10:30 a 18:00 horas.
Espoz 3125, Vitacura, Santiago de Chile
El título nos lleva a reflexionar sobre algo difícil o casi imposible de racionalizar. La pregunta surge de cómo podemos distribuir algo que no se puede numerar o pesar. O por decirlo de otra manera: ¿Quién podría ser capaz de distribuir semejante estado del alma? La sola idea del encanto, ya nos es inasible y no sabemos si es posible de producir, sugerir o retener. También nos puede hacer pensar en el mundo de hoy, donde se trata de distribuir incluso las emociones.
Los títulos de las obras de Ciro Beltrán siempre han manifestado una intención poética. Los de sus últimas exhibiciones, recurren al subterfugio poético para referirse con fina ironía, al destino de la pintura abstracta en los circuitos artísticos y a su posición como artista.
A fines de Junio de este año 2008, Ciro Beltrán cerraba la exhibición personal titulada “Campos efímeros” en el Instituto Cervantes de Viena, ciudad donde estuvo becado por el Ministerio de Cultura Austríaco, los meses de octubre a diciembre del año pasado. Luego de su residencia en la capital austriaca, Beltrán ha seguido viaje por Alemania, España y finalmente Chile. Los viajes han sido la tónica del desarrollo en la obra de Beltrán en el último año. Su nueva obra ha estado marcada por la itinerancia ya que ha trabajado sus pinturas en diferentes talleres y ciudades como Valdivia, Viena, Düsseldorf, Madrid y Santiago. De esta forma, algunas telas fueron evolucionando de un taller a otro, mientras otras fueron hechas solamente en un lugar y están signadas por la presencia de diferentes paisajes y sensaciones. Los cambios de escena le han dado a sus obras frescura y renovación, pero a la vez han marcado una rápida evolución hacia una línea consistente de trabajo compleja que había estado experimentando los últimos años. En estas últimas pinturas adquieren fuerza y seguridad aquellos motivos pictóricos que subyacían sutilmente en su pintura desde el 2005 al 2007. Y es sin duda esta serie la que de manera contundente, afianza su nuevo estilo.
Los títulos de las obras de Ciro Beltrán siempre han manifestado una intención poética. Los de sus últimas exhibiciones, recurren al subterfugio poético para referirse con fina ironía, al destino de la pintura abstracta en los circuitos artísticos y a su posición como artista.
A fines de Junio de este año 2008, Ciro Beltrán cerraba la exhibición personal titulada “Campos efímeros” en el Instituto Cervantes de Viena, ciudad donde estuvo becado por el Ministerio de Cultura Austríaco, los meses de octubre a diciembre del año pasado. Luego de su residencia en la capital austriaca, Beltrán ha seguido viaje por Alemania, España y finalmente Chile. Los viajes han sido la tónica del desarrollo en la obra de Beltrán en el último año. Su nueva obra ha estado marcada por la itinerancia ya que ha trabajado sus pinturas en diferentes talleres y ciudades como Valdivia, Viena, Düsseldorf, Madrid y Santiago. De esta forma, algunas telas fueron evolucionando de un taller a otro, mientras otras fueron hechas solamente en un lugar y están signadas por la presencia de diferentes paisajes y sensaciones. Los cambios de escena le han dado a sus obras frescura y renovación, pero a la vez han marcado una rápida evolución hacia una línea consistente de trabajo compleja que había estado experimentando los últimos años. En estas últimas pinturas adquieren fuerza y seguridad aquellos motivos pictóricos que subyacían sutilmente en su pintura desde el 2005 al 2007. Y es sin duda esta serie la que de manera contundente, afianza su nuevo estilo.
